Pobre ha sido el concierto que ayer nos entregó en la Sala Tropicana de Santoña (Cantabria) esta banda australiana formada íntegramente por bellezas femeninas.
Sus ceñidos trajes de látex negro no fueron lo suficiente para encandilar a un público, bastante escaso (que también es reseñable), pero sí muy variopinto, que se acercó hasta la mítica Sala Santoñesa.
Sus poses me resultaban antinaturales, movimientos extremadamente estudiados y con escasa improvisación, por otro lado fue un concierto breve, muy corto y tocado con ligereza como si existiera prisa por acabarlo.
El sonido de la sala resultó excelente por lo que hay que felicitar a los técnicos por el trabajo bien hecho.
Espero quitarme el gusanillo esta noche con la banda Storm to Come en la Sala Picos de Lierganes… mañana os cuento!
© Copyright: All rights are reserved – Derechos reservados.
Do not use, copy or edit any of my photographs without my permission.
No usar, copiar ni editar alguna de mis fotografías sin mi autorización.